alicia perez hernandez

Al alba… amanecer tuyo y mío

Al alba de tus ojos me sonrío

y veo que me tienes muy enamorada;

no hay nada más hermoso en ésta vida,

que desear estar entre tus brazos.

Ser paloma y de ti quedarme presa;

y que tus brazos sean la jaula de mis sueños

y tus besos sea la huella que dejes en mi cuerpo.

Seré la flor que tú cultivas;

el rocío que visité tu ventana de mañana.

Los ojos que desde lejos te divisen

caminar cansado por tu calle,

esperando sean mis brazos que te abracen

y te animen a seguir hacia adelante…

Seré la luz de tus ojos,

y la mano que sostenga la tuya.

Seré quien vele tus sueños

en tus madrugadas frías.

Seré el cuerpo donde descanses,

y el cuerpo que tu cuerpo abrigue.

seré siempre tu amor…

si mueres antes de que llegué

lloraré mil soledades…

moriré junto contigo en lejanía...

pensándote desde mi alma enamorada

con tus versos cobijaré mi cuerpo,

para sentirte siempre mío,

al alba de tus besos de amor…  

Llegué mi canto por haberme amado tanto.

 

(Este poema se lo mostré en mensaje privado y le gustó mucho es el último poema que le escribí antes de que muriera, ya se sentía muy enfermo e.p.d.)

Alicia Pérez Hernández

-No es la pluma la que escribe es el alma-


Amándote al alba -Mi amada Alicia-

Te siento al alba

dormida. -azteca de mis noches-

Fue noche derretida...

Fue noche de albahacar.

Dulcemente abrazado

a la almohada

tu cuerpo -mío ali-

en trasparencias claras.

 

En sutiles encajes

van tus  mellizas:

pétalos de celajes,

sutilmente encendidas.

Soy tu pecado,

tu fruta prohibida.

Acariciando voy

la rosa de tu ardentía.

 

Perdiéndose entre piernas

mis manos en las tuyas

entre telas

voy entrando...

Por entre vericuetos

mis dedos van rozando...

Siente mi pecho

calor enamorado. -de ti Alicia mía-

 

A mí viniste,

en celo estabas...

Fecundada fuiste,

enardecida, montándote al alba.

A tu vera yo me emborracho

del vino aromoso de tu bodega.

-¡Oh lagar derramando

 el azúcar morena!-

 Amada mía,

yo te amo al alba,

amada mía: Ali mía

entre sábanas blancas.

:A tu amor Alicia  llegué al alba:

 

-tú en mi, yo en ti, felices fuimos-

 

(Salvador 3-10-10- Granada)