Envueltas las piezas en pasión
en la entrega derrochan su aliento.
Sentir se destila en comunión,
regado sin punto cartesiano,
marcha como pluma sobre el piano
turbando las teclas en prisión.
Con notas que doman desaliento
en sinuoso andar de alteraciones
vibrando espera cada segmento
que los bordes escriban canciones;
modulando el sonido en momento
y en el piano vivas sensaciones,
el puente conectando estructura,
resonancia al aire que perdura...