nelida anderson parini

LA ESENCIA DE LOS SUEÑOS.

Durmiéronse los sueños

al son de aquel murmullo

mecidos en su arrullo

cayeron sus empeños.

Ahora eran pequeños

anhelos ya pasados

proyectos postergados

lejanos pensamientos;

pasión y sentimientos

en sueños arropados...

 

Yaciendo están callados

clamores prominentes

tan laxos e imponentes

parecen agotados;

son gritos relajados

átonos del presente

que en latir insistente

con fervor potenciado;

tañen sentir anclado

en alma trascendente.

 

El tiempo irrelevante

carece de sentido

mecido por latido

de pálpito constante;

compás alucinante

plagado de razones

acusan intensiones

voluntades sentidas;

urgencias requeridas

dilatan percepciones.

 

Fracciones del consciente

perfilan el paisaje

acoplando el bagaje

al estado inconsciente;

 disfrazase el ambiente

con suceso palpable

acepción razonable

de inaudito escenario;

que avala de ordinario

lo que es imponderable. 

 

Bañados de esta esencia

los sueños relajados

pululan fascinados

gozando la experiencia;

su lapsus de existencia

fugaz o prolongado

será determinado

de acuerdo a su extracción;

está a la convicción

su futuro ligado.

 

Soñar es al humano

motivo de ilusión

horizonte en visión

estímulo en lo sano;

mas el soñar es vano

sin determinación

que conduzca a la acción

en el plano consciente;

soñar es ser valiente

y actuar con convicción.

 

Murmullo son los sueños

de urgencias en el alma

donde el esfuerzo empalma

derroteros pequeños;

canalizando empeños

aumenta la esperanza

forjando con templanza

autónoma campaña;

gestada en propia hazaña

en  voluntad se afianza.

 

Así el Ser evidencia

 real naturaleza

dotando de riqueza

su inédita existencia;

su voz es cual sentencia

de sueños forjadora

que exhibe sin demora

demandas en el pecho;

de lo que tú estás hecho

comprenderás ahora.