Baja una nube entre la cañada
a paso de espelma baja y se aflige
se estaciona y tiembla
y entre los dientes oprime
un grito de llanto, una lágrima apagada.
Se acomoda la nube a pensar en nada
reposa su peso la nube de cisne
observa y llora
se cansa y se rinde
de tanto pensar en la mirada equivocada.
Nube sin luz, triste nube aplomada
que regresas pasmada al recuerdo de los tristes
te arrimas, te quedas
al lugar que te fuistes
al mundo perfecto de la felicidad olvidada.
Blas Roa