Improviso mi vida para seguir adelante,
manipulo mis sueños para que en ellos estés,
obligo a mi mente en volver a creer;
creer en que fue, y volverá a suceder.
Me agrada el recuerdo
aunque sangre las multiples heridas que dejo el amor,
pero me aferro a estar ahi,
a contar la arena del mar mientras te espero,
sin importar las noches de desvelo,
me despierto con la ilusión de tenerte,
y cuento las estrellas del cielo para matar el tiempo sin verte,
se convierte en tortura el deseo,
y el masoquismo se va haciendo rutina.
Acaricio la guitarra como lo hacia contigo,
y el arpegio denota mi tristeza,
la voz silenciada se apaga con las lagrimas,
y por culpa del recuerdo la cancion no termina,
el sol viene y va
y la esperanza que parecia tan fuerte
se desvanece en el silencio.
Se dice que el tiempo seduce al olvido,
en este caso alguno no llegó a la cita.