Aun amándote… mi gran amor,
Desplego tus alas, atadas solamente con los lazos de mi profundo amor,
Abro de par en par las puertas y ventanas de mi corazón,
Te entrego tu libertad, para que vueles libre por los cielos,
Que sea tu decisión…, tu libre albedrío.
Tu imagen, quedará grabada en el iris de mis pupilas,
las yemas de mis dedos no olvidarán jamás, la tersura de tu piel,
en mi corazón entero quedará impregnada tu esencia.
Tu grato recuerdo provocará por siempre, una sonrisa en mi rostro,
….aunque mis ojos se rasen de líquida tristeza.
Permite a tu boca quedarse con todos mis besos,
Si los devuelves, en mis labios sin remedio cada uno perecerá,
Como en un desierto, un lirio azul , de sed moriría.
De tus dulces besos guardaré la miel exquisita,
Para colmar el vacío de tu amor y endulzar con ella mi corazón.
Seguirás viviendo cada noche en mis más bellos sueños,
Serás hasta el final de mis días, grata remembranza…,
Como un ángel… que un día custodió mi vida,
Como un ángel… que me dio infinita pasión y alegría,
Como un ángel… que una tarde de Invierno, del cielo…
¡Dios me prestó!.
Claudia Alhelí Castillo
22-07-13