De rodillas ante ti Señor amado,
traigo hoy mi vida en oración,
tu conoces mejor lo que he vivido
hasta donde ha llegado mi aflicción.
De rodillas yo se que soy más fuerte,
es así como encuentro bendición,
aunque débil parezca de rodillas,
fortaleza encuentro en esta posición.
De rodillas mi Señor, tu me escuchas,
me concedes especial tu protección,
la victoria me concedes Dios amado,
cuando clamó a ti en oración.
De rodillas mis lágrimas derramó,
como lluvia tu la ves mi buen pastor,
y por pastos deleitosos me conduces,
cuando escuchas en silencio mi oración.
De rodillas se rompen cerraduras,
de rodillas se vence tentación,
de rodillas te aclamó Dios del cielo,
se que amas a quien vive en oración.
El poder que viene de lo alto,
solo llega cuando oras con fervor,
las ventanas de los cielos son abiertas,
su respuesta enviara el buen pastor.