Brasa
de tentación
la oscilación de tus caderas es.
Jubilosa enciende
los silencios ecxitados,
despertando mis pachorrudos
instintos.
Eloquecidos deseos vibran de placer
al contemplar,
la cimbreante armonía
de tu cintura.
Siguiendo con deleite la huellas de
de tus pasos,
dejados en el polvo de tus encantos.
El vaivén de tus pompas
cual fuego arrebatador, descongela
las impaciencias, volviéndolas torrentes
de lascivias.
El calor de los ojos
exploran el desnudo contorno
de tu naturaleza.
tratando con intrepidez
atrapar el hechizo.
que destellas.
bambam