Mélida Berenice Betancourt Sánchez
Una silueta...
Entuciasta, lista y alegre...Vivía fervientemente enamorada,aquella joven muchacha... Ella desconocíaaquello que aseguraba amar,aquello que a su vida le daba sentido,eso que a su corazónhacía palpitar... Pero sin importarsu ignorancia al amar...¡Amaba, amaba con locura! Cuando un día sin pensarloaparecío frente a ella...El cuerpo, con nombrey apellido,que muy pronto tomaría poseción de su amor... Sin pensarlo...Dejo que aquel jovenentrará a su vida... Le entrego todo lo que ellaposeía, su vida, su alma,y su amor...
Pero el destino,envidioso y celoso de entregarla a él por la eternidad... Se esmero en alejarlos,enveneno el corazón de aquel joven que adorabaa esa muchachita soñadora... Él cegado por aquel veneno,la hirio a ella de todas las formas posiblesy así la alejo... Al paso del tiempo lo únicoque quedo de ella fue...Una silueta oscura,triste y llena de lamentos... Que noche, tras noche...solloza al cielo su pena,teniendo la esperanzaque un día...Aquel joven que tantola amo, regrece...A darle vida de nuevo...