Con qué atrevimiento su sonriente rostro
su cara redonda y muy luminosa
se acercó al hombro de la diva triste…
Sus ojos enfocaron la perfecta esfera
que sobresalía en la noche joven
de densa oscuridad en el recinto de ella…
Hermoso contraste… densa oscuridad
y rostro de plata… con sonrisa enhiesta
con pómulos marcados en negro carboncillo…
Un beso de sus labios ella desplazó
entre su palma rosa y al aire lanzó
para que a ese rostro llegara fragante…
Qué bonita noche, qué densa oscuridad
la animó el contrate entre la una y otra
porque de plata la cara con ella reía…
además de niña la diva vivía sonriendo a la luna
es la gran verdad y tampoco ahora ella la resiste.
©Reservados todos los derechos de autor conforme a la ley vigente.