Andra

Me pregunto...

Algunos días me pregunto que hubiera sido de todo aquello que deje pasar… Luego medito, en los instantes acaecidos. En las caricias y besos que de mi vientre aborte… en las horas que me bebí de ese cáliz de sal… Por que en esta mísera existencia, fui dejando al tiempo que curara las heridas de otros y las mías; pero él se volvió mi enemigo y me robo el cariño que él me sentía…

¿Dónde?… Me pregunto por las noches… ¿Dónde habrá dejado aquel sentir que alguna vez tatué en su pecho?...
Porque me he dado cuenta que todo se lo lleva el tiempo y nuevas ilusiones borran nuestras huellas. Por que para algunos es más fácil seguir un nuevo sendero en la vida misma y el olvido ¡Si!... Existe para ellos.
Por que fue tan superfluo su sentir que se desvaneció de la noche a la mañana y nosotros los mismos de entonces seguimos siendo y estando tras el diván que atesora nuestra alma, por que cuando amamos o queremos lo hacemos desde dentro para culminar en nuestras afueras… Allí donde se quema la piel, donde nace la poesía de nosotros mismos; donde la marea mece y acuna nuestros cuerpos, donde todo comienza… o todo termina, por que en el quiebre de aquel cúlmine sentir, se combate cuerpo a cuerpo; entre gotas de sudor y la pasión y el deseo nos lleva a la vida y la muerte… Morimos entre los brazos de los que amamos y luego ellos mismos nos devuelven a la vida…

Sigo pensando… aunque sinceramente quisiera ser; un sonámbulo más que habita en medio de esta intemperie…