Reminiscencias.
1
En un jardín bendito palpo tu alma,
vuelvo a ver atrás a manos llenas
manos llenas de cada un suspiro ,
y que este silencio no haga daño.
2
Ecos de glorias tuyas en mis ansias
quitando de mi cuerpo las aldabas,
¡Libertad! Son tus besos en mi lecho,
nuestras miradas hablan por sí solas.
3
Y hay besos que se beben las miradas,
son las reminiscencias como olas,
que chocan en rosadas memorias.
4
Ven y quédate junto a mi vera,
llena tú mi lienzo a tu manera,
así como el pintor va dibujando,
¡Amor como se pinto la primavera.!