El triste llanto
de la novia
ha cesado…
Un brillo
en su mirada
sin ojos
y una sonrisa
en su rostro
sin labios.
Le ha visto llegar,
en carne y hueso,
después de tantos años,
frente a su mausoleo,
se ha detenido…
La mirada
del joven hombre…
en la fría roca,
del fino material
de la esbelta figura
de la novia dormida
le confirma
que su amado
ha regresado.
Nostalgia siente,
el joven caballero
y sin aparente razón
la bella escultura
ha limpiado.
Y con dulce cariño
ha colocado
bellas flores
sobre la novia dormida.
Sin saberlo,
se ha enamorado
de la bella novia
que en paz descasa.
Y mientras el joven
siente sin saber,
la novia sabe
que su amado
ha regresado.
De un amor de antaño…
la felicidad
no se alcanzará
sino hasta que él sea
espíritu de verdad.