No tengo palabras
aveces me sobran
otras se quedan
otras se marchan
existen silencios
que el tiempo borra
naufragios de pieles
que se estacionan
y se envuelven
se hacen tristeza
agonizan en las murallas
entre inocencias
entre escombros de piernas
como tormentas ajenas
islas de caricias
meses, años; esperando
no tengo palabras
a decir verdad me sobran
caen en los racimos
en la uva del dia
en los cuerpos engañados
en la levedad de mi poesía
cíclica
envuelta en nubes
como pan de mesa solitaria
como corredores
como atletas cansados.
Son las palabras que se guardan
aquellas que lo dicen todo
sin ser modificadas
sin que se asomen a tu ventana
adornadas palabras que no hablaron