Hace frío dijiste ; tengo fiebre
Y hambre, luego yo me escapé para verte, salté la medianera
De alambre y me enredé el suéter ,pero lo até
Improvisadamente para hacer de cuenta que nada me importa
Crucé la calle vacía ,pero con el consentimiento
De que el transito me podía tragar, espere el bondi
Que no llega nunca, subí y me senté en el asiento más oscuro
El del fondo, donde se ve todo, el que siempre está disponible
Porque a nadie le gusta estar solo.
Llegué a tu casa con las manos frías
Con los pies que me temblaban, con la mirada
Entre los dientes, y con tercas ganas
De despedirme .