María

¿Y si lo intento?


No sé de hijos.

Amo lo abstracto.

Y no respeto reglas.

 


Pero si te abro mi puerta

sabré de pequeños,

aceptaré lo concreto,

y adheriré a las normas.


 

Si continúo sola

se irán los niños,

se esfumarán las formas,

y caducarán reglamentos.