Amor prohibido, así llamare a esa fugitiva
Acaramelada en el recuerdo placido de la mente
Conviérteme en fugitivo de tus roses tibios
Ella, solamente ella, la que está al otro lado
El lado inalcanzable y solitario donde llueve sin parar
Mis manos inquietas sin poder traerla hacia mí
El silencio de las caricias guardadas entre ti
Solo suspiro, mentiría si te digo que no te deseo.
Inaudito ruido estremece los sonidos
El soneto de tu color de voz, cantaba
Como la sinfonía nocturna de romance
Esperaba sentado sobre las montañas
Afinando el oído y deletreando tus canciones
Efusivo danzar del viento sobre nubes
Acompañaron mis pasos de ballet con tu canción.
Eran cientos de millas llevando la distancia
Era el mismo sol calentando escalofrió despiadado
Una sola luna reinando como princesa en el universo
Y la misma brisa que descendía en tus cabellos de oro
Ha llegado a este hombre enamorado.
No pensé llegar allá; y mis pasos insistieron
Recorrieron valles surcado por cordilleras
Andes altos, muy altos besando las nubes
El cansancio no me dejo exhausto
La llegada recargo mis fuentes vacías, sin energías
Allí pude leer tu corazón casi imposible de descifrar
Atónito; muy enamorado, ha ocurrido así
Aunque parecía tan lejana.