No me mires directo ojos,Ya que tal cual el sol al veranoNo se puede evitar, no me hables suave al oido,ya que igual al vientoque te envuelve en ventiscaentre mis brazos te voy a arropar,no te acercas aún más a mí, ya que como el sol en el crepúsculopor un momento seriamos dos siendo unopero rápidamente solo quedaría unoya que uno se acerco y el otro poco a poco se alejo,me ganaste en este juego de ajedrezdonde el rey no muerepero el corazón tal vez,tus historias yo escuchopero las desearía ignorar, ya que me martiriza escucharte sin poder hablar, ya que todas mis palabrasun amigo no puede pronunciar,me miras a los ojosy se eriza cada vello mi piel,mis ideas se nublan, y por un momento solo pienso en ti,ni juegues con tus labiosal conmigo hablarya que si te llego a besarno me culpes por no poder soportar,pero como no hacerlosi son mi agua bajo el cielo de un desierto,no te deseo el mal con elpero desearía tu bien junto a mí,por un capricho del viento sucede esto,si tan solo te hubiera conocido antes y el después, este poema seria escrito por el.