En sueños de cartón escribí mi historia llena de sabiduría mundana de simple recuerdos vagos de algo que quería y no pensaba en tener.
Así inicie tu historia llena de etílicos mensajes de advertencia y sublimes conflictos de pertenencia, compre, vendí y subaste felicidades que nunca fueron nuestras
Adiós es la primera palabra que se me ocurrió cuando te conocí siendo así el mensaje más concreto que hoy retoma fuerza.