IV
Vienes a cobrarme deudas de mi vida por un beso
Y nada pierdes al doblarle criptas a mi apuesta
De este lado del Mar la mano es más fuerte por lo literario
Y precisamente floja para trabajar
Pero las buenas noticias se manifiestan (mis oficios son variados)
Y ante todo en mis escritos caes como el hierro
(En donde nada gravita caen tus rasgos
Y en lapidas de aquel beso caes como el Hierro)
¿Pero entonces qué me endeuda a sembrarme claveles en las manos…
A exhumarme cada noche lejos de la humedad sin tierra…
A signar aquel beso en tus labios…
A tallarte en mis poemas
A llenarme de domingos para borrar mí nombre en tu obituario…?
Tal vez no estoy Muerto en ese beso Tuyo
Y por las noches te levantas a tallar mi Nombre (pero en tus labios)
O tal vez sí estoy muerto y ese beso se levanta de mi osario inútilmente
Porque sabe que para ti no es nada
Y porque sabe que es el único que tengo
Sabe que también quiero Vivir...
Y morir (pero en tus labios)