Sé que los ángeles,que aún no he visto,
jugarán con mis cenizas
y entenderán mi juego.
Que recogerán mis lágrimas
regadas por el suelo
y con ellas formarán pequeños aguaceros
para refrescar a tiempo las auroras.
Que mi voz que se quedaba presa
llevarán hasta el canto de pájaros
para alimentar el sonido mañanero.
Y las palabras, solas, sordas y sin ecos
no encontrarán memorias,
yaceran escondidas en cualquier tablillero.
Y la luz que se escapó del rostro
brillará en otro cielo
a menos que su norte se confunda
y solo se permita ser parte de un lucero.
mas no importa donde esté
allí estarán presentes los ángeles que aún no veo
que me darán la libertad...espero