Te Vendes (1950)
Agustín Lara
Te vendes,
quién pudiera comprarte,
quién pudiera pagarte
un instante de amor.
Los hombres
no saben apreciarte,
ni siquiera besarte
como lo sueño yo.
La vida,
la caprichosa vida,
convirtió en un mercado
tu frágil corazón.
Te vendes,
quién pudiera comprarte,
yo no puedo pagarte
ni un minuto de amor.