Eres tu, esa entelequia
eres tu, esa incandescencia
eres tu, ese sosiego
eres tu, esa eufonía
que cualquier psique necesita para existir.
Dime tu amado mío,
¿Cómo podra, mi ser, hacer lo que desea ser en tu omisión?
Me impugno, me niego.
Solo trata de discernir que yo sin ti no podría existir.