Un día me levante en la mañana y sentí que mi corazón y mi sentir se habían quedado sin palabras
Asombrado me dio risa, pero por dentro un león rugía con mucha prisa, me quede quieto para saber si mi ser corría
Y latido a latido mi corazón respondía, que te pasa compañero, donde está la fuerza mía, y de repente una sombra cubría.
El sol que me alumbra todos los días, Sentí morirme eso yo no quería
Pero al darme cuenta estaba dormido y con una gran sonrisa, Viendo al amor de mi vida, hablándome de nuestra vida.
Yo estaba sin palabras ella decía, Pero no se preocupen a mis amigos les decía, Que yo hablaría y desde el cielo los miraría
Y vi que muerto estaba eso yo nunca lo pensaría, Era el deseo de una vieja amiga, (la soledad)
Que a través de una revelación mi DIOS me mostraría, y él me decía, tranquilo, eso pasa todos los días, son los recuerdos, las intenciones y los malos deseos de los que quieren vivir aprisa, por sujetarnos al pasado, y no querer olvidarlo, por eso yo te digo mi amigo, mi hermano, que el pasado hay que sepultarlo.