El aroma de tu presencia
llena todos mis anhelos,
uno a uno recorren las vertientes
de tu estelar figura,
me pierdo entre tus deseos y los míos
en la loca aventura de embriagarnos,
en el puro placer de un recuerdo
que arde cada noche.
En tu piel bordo el verbo pasión
conjugando infinitas caricias,
dibujo mil noches de placer,
fortuitos encuentros nocturnales
que desbordan nuestras noches,
al amanecer,
la promesa infinita jamás olvidada
de volver a deshacer
todo lo que nos ata a este mundo
y fundirnos cada noche
como si la última fuera.
______________________________Carlos Dos Santos Daniel
“La palabra amor llegó siglos después del amor”
José Narosky, escritor argentino.