Hagamos un trato; Propongo tres tardes donde el viento
mueva con intensidad las ramas.
Donde el sol este ocultándose y el clima este cálido.
Mientras tanto pueda respirar lentamente el perfume de la noche
que nos acecha y que pueda asimilar con una suave
locura la intensidad de la luna.
Sugiero cierres los ojos,
para que escuches el murmullo del aire,
que detengas por un instante tus respiros
y sientas como va al bit de tus latidos.
Te propongo que perdamos el miedo
y nos recostemos bajo a la sombra
de los árboles.