Mi sueño es pasarme de la raya
saltarme los semáforos del cuerpo,
cruzar el Rubicón de su ombligo.
y perderme en su isla del tesoro.
Mi sueño es quemar Troya una noche,
sacarme mi disfraz de caperuza,
entrar en su caja de Pandora
y robarle cada rosa de sus vientos.
Mi sueño es subirme a su parra,
comerle los racimos de sus uvas,
burlar a los perros de su huerta,
para ser la serpiente y la manzana.
Mi sueño es ser el genio de su lámpara,
el duende que se esconde en su bosque,
el Simbad que navega por su espalda,
el príncipe que la despierta con sus besos.
Mi sueño es acelerar en cada curva,
quedarme sin frenos en sus muslos,
que ardan mis motores en sus labios,
y agotar mi gasolina entre sus piernas.
Mi sueño es cabalgar en su Pegaso,
picarle como Escorpio con mi aguja,
embestirle Capricornio en su Virgo,
y ponerle muy de Aries a su novio.
Mi sueño es descubrir su Amazonia,
llegar hasta su luna sin cohete,
sentir como su horno me hace pan,
y abrirle y cerrarle sus corchetes.
Mi sueño es convertirme en su recreo,
que salte a la comba en mi lengua,
que tome entre sus manos mi juguete
y con él se regocije y se divierta.
Mi sueño es ser Chopin en su piano,
un Bach concertando con su órgano,
mientras ella me solfea vivamente
como en la Flauta Mágica de Mozart.
Mi sueño es subirme en su alondra
y volar en golondrina hasta sus ojos,
perderme en los cisnes de su cuello,
y entrar en su paloma con mi sangre.
Mi sueño no es amarla por las ramas,
sino en su temblor de mariposa,
envolverla en el torrente de mi savia,
y ser siempre la abeja de su rosa.