Me senté de cara al mar
y canté mis penas,
me acompañaba una brisa,
el sol y la arena
Me senté de cara al mar
y con el ruido de las olas
escuché la voz de una sirena
entonando unas notas.
Me senté de cara al mar
y miré el horizonte
tan distante, tan confuso
y a veces sin nombre.
Me senté de cara al mar
y dibuje una sonrisa,
para que me recuerde
que en el alma llevo,
un volcán de vida.
Me senté de cara al mar
y esperé a la noche,
para contemplar las estrellas
y volver a encontrar mi norte.
Me senté de cara al mar
espero volver un día
para sumergirme en sus aguas
y viajar a mi mundo,
donde todo es melodía
Me senté de cara al mar...