De camino a la montaña va mi canto
hacia allá, la bruma del páramo vecino
páramo de lluvia, atuendo parisino
contenta va mi carga a risa de llanto.
Poeta no me creo, trovador ni tanto
pero algo he dejado a vísperas de recibo
canción y letra sobre el hombro del destino
y gargaras de ginebra pa\' moldear el canto.
Soñador, si me atrevo a pintar tu manto
praderas de amapola donde el alma regocijo
y donde la nieve espera recostada en tu campo.
No le temo al valiente, que teme al espanto
mi poema solo hiere en el coito anochecido
como ojos cobardes, mis ojos de amanecido
te leo, poemilla entre versos y garabatos.
(sin mas licencia que la de un joven que solo
quiere montar una de poeta)
Blas Roa