Justo en el momento de tu despedida llegò esperando tu partida,
sin preguntarme abriò las puertas de mi alma triste y me hizo compañia,
se apoderò de mis pensamientos, de mis pasiones y de mis canciones,
y hoy es mi compañera que se se encarga de mì y de mis emociones.
Me acompaña siempre, no pregunta donde voy ni me hace algùn reproche,
en las noches espera mi llegada y es mi compañera en las madrugadas,
y me ha preguntado por ti, me ha preguntado si te he dejado de amar,
si te he visto por allì, o, si aùn vives dentro de mi.
No esperaba su llegada, mirò mi tristeza y me cobijò en el lecho,
platica conmigo, calma mi nostalgia y me acompaña en este dolor,
siento su presencia en mi sangre y hasta dentro de mi cuerpo,
al verla sonreìr es como una ironìa que me dice ya no sufras, yo estoy aquì.
Es como una sombra que me busca y me persigue,
que sana mis heridas, que llegò a buscarme y no me presiona,
que ha sido mi fiel amante y compañera en los momentos de tortura,
la que nunca me abandona, ella......ella se llama, Soledad.
RICVEL