El horizonte,
parece ser pero no es.
Las líneas paralelas de La Tierra,
parecen tocarse pero no se rozan.
La mente de mi vientre,
ve aunque no mira.
Es un caos espacial,
en las órbitas de la razón;
- Ya que, cuando ésta cede el infinito acrece-
Las nebulosas se hacen presentes,
aterrándome en su forma omnipresente.
Siempre ando rondando por el Espacio,
en forma de circunferencia voladora.
Sé que si me adentro en el ahora,
el tiempo se colapsa...
Y yo me voy como un soplido,
en cada segundo, minuto y hora,
del vaporoso Universo.
Soy viajera, y sin embargo, no lo soy.