Ríes, me encanta,
resuenas en carcajadas,
oigo, me emboba,
sólo por como
se escucha
en tu hermosa boca.
Pienso, me sonrojo,
me alegro de que
no lo notas.
Te miro, me miras
y no evito
que se estiren
las comisuras
en mi boca.
Te acercas,
me acongojo,
sólo por saber
que nunca serás mío.