Bella diosa que guarda en si muchos secretos,
figura que alimenta mi alma con su recuerdo
Aquella delicada mirada que muestra tus ojos,
es suficiente para arrancarme de la tierra
y llevarme al mismo cielo.
Tu cuerpo, aquella ambrosia de los dioses.
que hace que cualquier hombre se enfrente a la hybris.
Tu alma envestida en tu cuerpo
que provoca que me enfrente a la muerte.
Y en aquel suspiro de mi alma, se ve despojada.
¡me dejas vacio!
La vacuidad se instala en mi corazón, en mi cuerpo,
de aquel que amo y se sintió perdido.
Aquel ser que te nombra como plegaria.
Aquel ser que al ver tu sonrisa, se somete a tu voluntad,
y se vuelve nada en tus brazos, y a la vez se vuelve todo.
Todo en un suspiro, en una mirada, en un beso.
Todo en el mismo tiempo, y en la misma nada.
Con solo rozar tu piel, con mis labios,
me embarco en un viaje infinito.
Aquel viaje que me hará surcar la fantasía, la ilusión, la misma vida.
Con el hecho de haberte poseído por un instante
Y a la vez perderte por estar prohibida.
Caballero Nocturno