Alcanzamos el bajamar de la esperanza,
en el mar de los amoríos,
sobre una tenue mirada,
la mirada más inquietante y audaz,
la mirada.. tú mirada, la más descubierta
y profunda por ti, ciega por mi.
En mi patera he de zarpar
al fin de este tibio rocío
de ojos cubiertos y misterio,
entre este amor nunca visto.
Hoy enjuagas tu cara
debajo de la luz de estas estrellas,
que de alguna manera,
las encuentra otra vez tu mirada.
Un antes de tus ojos
está rompiendo mi presente, y mi después,
ya no contemplo el brillo de tus pupilas
pues el viento se equivoca de dirección al encandilarse desde ellas
mientras navego con la solemne ojeada
que se anima desde el corazón.
Todos los derechos reservados,2009©BryanGómez