Inclinación a tu persona fue desde un principio,
decírtelo nunca fue opción seria un tirarme al precipicio,
mis ojos se acostumbraron a observarte como mujer ya apartada,
mis labios se entrenaron a llamarte amiga amada,
pero mi pensamiento jamás logro sobrepasar la verdadera ilusión,
lo ultimo que sobra es decirte cuida que no te robe cualquiera el corazón...