*** Versos de la Rosa ***
El suspirar de la vida que se evade
asombra al ser que respira el alma,
que puedo turbar para encontrarte
calentando la sábana de una cama.
No quiero despertar de este sueño
que tolera tu presencia misteriosa,
no quiero abrir los ojos a esta vida
viendo mí soledad en camas rotas.
Que ser toleraría no saber amarte
por no celar esa cama de suspiros,
sin el achispado frote de tu pecho
mi soñar se encubre en ese olvido.
Un cabezal con somier de muelles
dispongo en el centro de la alcoba,
con brocados en su sábana blanca
por saciar esta sed que me devora.
Señora si soportas mal de amores
otórgate en el tálamo de ensueño,
enseñando al hombre que te mire
ese secreto del razonar del sueño.
Me apodan malvís al pardillo flaco
por no haber hecho el amor otrora,
casto existir llegado a ser ya viejo
soñando en su cama que el adora.
Al existir el sueño cuando duermo
vacio esa conciencia de maldades,
despertando al aliento de resuello
en la sombra amante de verdades.
Ese esqueleto marchito por la vida
se adormece en el catre desabrido,
ya no despierta esa luz de su vivir
enamorado de ternuras del olvido.
Después cuando se pudra la carne
su materia encamina a su destino,
callada enmudecida la cama vacía
esperará a dos casados en su nido.
Autor:
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
23 de agosto de 2013