Hoy el dolor escondía la virtud
las espinas encajas en el alma
la muerte dormida cubrida con
la manta del amor
las estrellas palpitan sin brillar
la castidad de la armonía bailaba
danzas con la santidad
el libre caudillo sentado en su trono
esperando la cesación que del cerdiz
procediera esa sensacion
vi de compaginar el confeso
por mirar de fronda la vejes con
de mirar de terciopelo un amanecer
y al final la lujuria soborno la inocencia
de su silencio conquisto la soberbia
pero jamas volvió...