La antigua terminal aérea nos reunió ,
haríamos un corto viaje ,
mucha gente con prisa
por no perder su vuelo ,
mi serenidad me precedía ,
siempre estoy con el tiempo adecuado
por los inconvenientes ,
un té era mi compañía ,
revisé nuevamente los documentos
que se deberían someter al análisis
para su aprobación ,
así los minutos ,
percibí unos pasos hacia mí ,
levanté la vista , si ,
tú me habías reconocido ,
hace varias décadas en esta misma
terminal nos habíamos conocido
muy jóvenes , tú de regreso a San José
donde vivías , yo de viaje a tu ciudad
hacer un trabajo ,
era un joven profesional que viajaba
una vez por mes a esa tranquila ciudad
de esos tiempos ,
me puse de pié , mi corazón palpitaba
con una emoción
¿ de destino que quieres decirme ?
tu sonrisa conservaba la cálida
forma de tu juventud ,
allí estábamos frente a frente
las palabras se detuvieron momentáneamente ,
luego surgió ese beso que el tiempo
no podía borrar ,
el abrazo fué extendido ,
luego nos sentamos ,
nuestras manos unidas decían
mas que nuestras palabras ,
en la profundidad de los ojos
se leía claramente que no habíamos
olvidado aquel encuentro de jóvenes
que despues de mis ocupaciones ,
nos tomamos tres días
en un viaje interno por la hermosa
Costa Rica que nos acomodó
en su privacidad ,
seguro que nuestros corazones
viajaron a ese pasado exquisito
que no olvidaremos ,
el caminar de la vida nos reacomodó
otro viaje del cual aún no salimos ,
pero en esta ocasión ,
con la madurez de un amor
que no se puede olvidar .