En aquella noche oscura y fría, te pensé y tras de mis sueños y pensamientos... te quise a mi lado para recostarme en tu hombro fuerte y cálido, para buscar la libertad de mis lágrimas, que oprimían mis sentidos y bloqueaban mi pensar: pero no estabas ahí... y entonces descubrí que soy muy fuerte para poder darle a mi s lágrimas la libertad que clamaban desde lo más profundo de mis entrañas... dándome así mi propia libertad...