Nadie en la noche mira los abedules
Su luz transparenta la oscuridad total
La luna huye hacia el poniente
Y vos no cuentas más las hojas que se caen
Queda pendiente el alba, queda pendiente
Esta dudosa la ruina del invierno
Las luces lo empujan a su cueva
Calandrias le dicen su obituario eterno
Se que nadie llegará a pedir por el abrazo
Vivo aun con la indigencia de no tenerte
Vivo y no se asoma ningún amigo
Están esperando el nacimiento, otros el suicidio
Nadie en la noche mira mis pinturas
No tengo desdichas, la felicidad no es tanta
Robo pedazos de ideas en un rincón de mi pasado
Lo trasunto en poesía desganada
Cambio lo profundo de lugar,
Casi no queda nada
No hay sombras, la oscuridad las ha parido
Saben de ti, te esconden de mi sangre
Y no estás lejana, es mi sangre que no llega
Deambula por las venas, dice pavadas
Arrulla ideas descabelladas, come jirones
Llego a la pobreza buscada, me falta todo
A partir de ahora, sobra todo
No tengo nada