Con cuantos sueños no me has bañado,
con tu figura desnuda llenos de suspiros,
con delirios e ilusiones, y he de deciros
que navegando hacia tu amor he naufragado.
Sí, hundirme con inspiraciones mas no claudicando
sobre los versos que han de seguiros,
nada cuerdos, nada realistas y a veces han de huiros
por las huellas sin retorno que has dejado.
Y mi alma alucina con tu deslumbre,
viendo pasar gozoso tu imagen en la vía,
con películas de sueños y emociones que he vivido.
Me faltas para inmolarme en la lumbre,
mis sueños no son de resignación, y solía
suspirar tu encanto, que nunca se pierde en el olvido.