DESDE EL UMBRAL DE MI PUERTA
QUE CIERRO DE NOCHE Y ABRO DE DIA
OBSERVO PERSONAS PASAR CAMINANDO
MIENTRAS ESCUCHO FRENAR AL TRANVIA.
CURIOSO EL SUBIR Y BAJAR DE LA GENTE
SUS HUELLAS DEJAN EN CADA PISADA
UNOS SALUDAN CON GESTO SONRRIENTE
OTROS MOVIENDO CABEZA Y MIRADA.
TODOS LOS VIERNES DE CADA SEMANA
PASA PABLITO SIGUIENDO A SU MADRE
CAMINAN DE PRISA CON LA VISTA BAJA
SIN MIRAR A NADIE.
ELLA, REBOZO EN LA ESPALDA CRUZADO
SOSTIENE LA ROPA QUE DEBE LAVAR
EL NIÑO DESCALZO CON PELO RAPADO
DE SIETE AÑOS QUERIENDO JUGAR.
TRAS LA COLINA EL SOL YA SE ESCONDE
EL MANTO OSCURO AMENAZA BAJANDO
DIVISO A LO LEJOS RECORRO BUSCANDO
EL TIEMPO PASA Y SIGO ESPERANDO
DESPUES DE UN BUEN RATO LOS DOS
APARECEN, SON LENTOS SUS PASOS
LES CUESTA TRABAJO LA TIERRA PISAR
SOMBRAS ERRANTES LAS MIRO PASAR
TODOS LOS VIERNES ESPERO SENTADO
PRENDO MI PIPA Y ME PONGO A FUMAR
ALEGRES LOS MIRO, PABLITO EN CABALLO
DE PALO QUE NO DEJA DE CORRETEAR
UNA TARDE DE MAYO QUE NUNCA OLVIDO
EN PROCESION VA PASANDO LA GENTE
CUATRO NIÑOS LLEVAN EN HOMBROS
EL FERETRO BLANCO Y EL CABALLITO DE PALO
UNA MADRE DE LUTO EN SOLLOSO Y LLANTO
OTROS ACOMPAÑAN AL FUNERAL ORANDO
TRISTE CUADRO DE MI MENTE NO APARTO
AL SEPULCRO SE VAN ACERCANDO.
CORRE EL TIEMPO Y SIGO ESPERANDO
AL CHIQUILLO DEL CABALLITO DE PALO
SOLO MIRO PASAR CON PELO CANO
UNA ANCIANA QUE VA CAMINANDO.
ESCRITOR 49
MANOLO DELGADO ANAYA
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS
PUE.-MEX.