Discernir un halito exabrupto.
Cuando viajo por tus ojos
De tanta mujer.
Y sobrepasarme
En el ángulo exacto de tu cintura.
Que más diera esta ocasión
Si me encontré con el lado
Contrario de tu casualidad,
Y si te amo esta noche
Solo para olvidar.
No tendrás ni sombra sobre tus lágrimas.
“yo” callare, riendo triste,
Luego llamare tu nombre
Por el ruido musical de tus mejillas;
Que se sonrojan de sombras
Tenues de la imaginación.
Francisco De Tescia