Que los latidos de nuestros corazones
solo tengan el sonido del amor,
caricias sin interrupciones
alimento de nuestros deseos,
besos sin fronteras y sin medidas
tatuados en cada poro de nuestras noches,
de tu piel y la mía
un lienzo de pura pasión en silencio,
de mis manos y las tuyas
navegantes inquietos de nuestros cuerpos,
en las alas de nuestros sueños
el universo infinito no alcanza.
Que la sinfonía de nuestras almas
sean la llama eterna de nuestro amor,
entre tus versos y los míos
escribimos solo poemas de amor,
que nuestras miradas
sean el único lenguaje necesario,
-no hacen falta los verbos-
que nuestros días
tengan la sal y la pimienta
-sabor intenso y pleno-
rapsodia infinita de nuestras almas.
_______________________________________Carlos Dos Santos Daniel© Reservados todos los derechos de autorPropiedad intelectualVenezuela