Ecos que viajan con el viento
susurros que siguen su rumbo de olvido
encadenados al ayer y al ahora
palabras esclavas de la soledad
ahora propiedad del tiempo.
Ecos que al ser escuchados
no redimen la soledad de esos días.
Ni tampoco me devuelven
la confianza y la fe
hacia un amor terreno
Sólo son ecos de palabras
sofocadas de melancolía
que anularon y aun anulan
mi razón y entendimiento.
El recuerdo de mi piel
siendo un desierto marchito,
falto del agua vital de tus besos
me quema y me consume de nuevo.
mientras mis dos voluntades
se van extinguiendo
aquella que perdi ese dia
y la que ahora una vez más pierdo.
Arely