Me deslizo entre compases improvisados,
Cada nota es como un marcapasos que me da vida.
El pentagrama espera desnudo, me mira,
materializo recuerdos ocultos con los años.
Soy el resultado de las experiencias vividas,
de las almas que me ayudaron a subir al escenario.
Canto por el futuro mi tono temerario,
toco por ellos, por las experiencias tenidas.
Algunos le componen himnos al amor
otros con la música anestesian su dolor;
a la justicia le cantan los más osados.
No importa qué clase de músico seas tú
por que si algo tenemos en común
es que todos queremos ser escuchados.