Sin rumbo a mi antojo
en esta tierra y sus vientos.
Cada molécula en
mi lengua te nombra.
Una piedra hija de otra piedra,
arena descendiente
vagando entre mis pies.
Todo lo que diga
será dicho para ti.
Domingo, energía desenfrenada.
Puro aliento.
No hay misión solo deambular.
No hay credo solo técnica.
Atrás será adelante y
el aliento solo será
para llegar con habilidad a ti.
Adoro el oxígeno y no es un perfume.
Las esencias son inciertas.
Los caseríos se desintegran.
De mi boca sale tu nombre