Cansada estoy de palabras necias,
de escuchar tus reclamos llenas de dudas,
de ver tu rostro con el ceño fruncido,
de sentirme intimidada por tu mirada.
¿Hasta donde he podido soportar?
Más de dos décadas llevamos unidos,
tantos años echados al vacío,
miles de sueños rotos he tenido,
todo por amor, he creído.
Me he engañado a mí misma,
esto no es por amor, nunca lo ha sido,
tan solo fueron ilusiones compartidas,
miedo a la soledad, pero...
¿por qué aún estando contigo,
me he sentido sola?
Gritos callados al viento he arrojado,
¡Que alguien me escuche, por favor!
Este es un grito desesperado,
le grito al amor, que me ha fallado,
le grito a los sueños, que rotos han quedado,
le grito a mi alma, ¡Despierta!
que en letargo interminable,
adormece a mi corazón loable.
Quizás sea tiempo de levantar la mirada,
escudriñar mi presente,
rescatar lo poco que queda,
de este corazón,
que aún tiene mucho amor para dar,
y miles de esperanzas guardadas...
Quizás, quizás aún esté a tiempo... de amar!