Te quiero porque existes en el infinito
del País de mis sueños.
El País de los sentidos
de la tristeza,
y a veces de la sonrisa.
Te quiero porque no preguntas por el mañana
y sabes que la música
sigue sonando
a pesar de no saber el ritmo
y el compás.
¡Y quién sabe del mañana
si apenas sabemos algo del presente!
Nada del segundo
que va a transcurrir
a partir de este momento.
Suena una canción.
Me acaricia las entrañas.
Me altera por dentro.
Dilata mis sentidos
cualquier cosa que sepa a ti.
Aunque sé que no estás aquí.
A mi lado.
Sé que estás.
Por el perfume que rompe el silencio
y la sonrisa tenue de unos labios dibujados.
Y sé que la tristeza de los momentos
es sólo un pasaje de nuestras vidas.
Dura lo que el viento
en una tormenta de verano.
Sólo un momento.
Suena una canción.
Me acaricia las entrañas.
Dura lo que el viento
en esa tormenta de verano.
Sólo un momento.
Toda una eternidad tienes en tus manos.
Por eso te quiero ahora.
Y mañana.
Porque existes en el infinito
del País de mis sueños.