Lo de atrás, ya pasó.
¿Para qué remedas,
si la tinta ya se usó?
Entre tanto, ella sigue.
Tu enredado ¿Para qué?
Vago recuerdo en el camino.
El que no arriesga no gana.
Pero ganadores hay pocos
y donde deciden dos,
de poco vale el coraje
si a un muro de concreto
con una pluma altanera
pretendemos derribar.